jueves, 28 de abril de 2016

¡SAN ISIDRO¡


San Isidro era un pobre sembrador
que sembraba y sembraba
con todo el calor.

Nunca esperaba nada de los demás
trabajaba por ellos
y bien le daba igual.

San Isidro que hospedaba tranquilo en su ermita,
donde todos los azuagueños
obsevan esa estatua tan bonita.

Si tú por San Isidro no vas a verle,
el pobre sembrador
se siente un ser inerte.

San Isidro nos da a todos una gran lección,
que lo importante no es tener de todo,
sino un gran corazón.

San Isidro tenía su cultivo bien cultivado,
lo consiguió con bastante cariño y amor
aunque le costase mucho dolor
él siempre todo lo ha valorado.

Por esta causa te digo mi amigo
que des toda tu vida por los demás
como fue San Isidro muy capaz
y pídele que siempre se quede contigo.

      Jorge Cabezas Grillo 6º A


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Añade un comentario