Un día estaba en casa de mi abuela que me iba a llevar a ver las cabalgatas de los reyes magos. Cuando salió un virus llamado Covid-19. Ya había cincuenta contagiados, noventa que estaban dados de alta y cien fallecidos.
FIN
Un día estaba en casa de mi abuela que me iba a llevar a ver las cabalgatas de los reyes magos. Cuando salió un virus llamado Covid-19. Ya había cincuenta contagiados, noventa que estaban dados de alta y cien fallecidos.
Un día fui al jardín con mi perro y me dijo:
-Hola.
¡¡¡¡¡¡¡QUEEEEEE!!!!!!- exclame
- Bueno vamos a jugar.
Fuimos a jugar. A la mañana siguiente le pregunte a mi perro si todavía hablaba y me dijo- ¡GUAU!- Ufff menos mal- dije y jugamos con la pelota.
Estaba decorando mi casa con purpurina para que quedara mas bonita. Salí y me encontré con un conejito y decidí llevármelo. Lo arropé con una manta supercalentita y le di una zanahoria. Luego me senté con el a leer un libro de fantasía y a comer una galleta de chocolate. Cuando llego la noche le hice una cama al conejito. Ala mañana siguiente decidí ponerle de nombre peluche y lo lleve de paseo todos los días.
Un día me levanté de la cama y noté queme estaban saliendo alas. Salí al jardín, empecé a volar- YUPIIIII!!!!!!!!!!- exclame. Luego las alas empezaron a soltar purpurina. Me vieron mis padres y gritaron- ¡¡¡¡¡¡ALDARA BAJA!!!!!!!- no les hice caso, así que seguí volando hasta que me cansé. A la mañana siguiente fui a la escuela volando y así todos los días.
Aldara Cabanillas Hidalgo 3º B
De repente me doy cuenta cuenta que me están saliendo alas:
Era Martes, me desperté, desayuné, me vestí y me fui, cuando llegue a clase todos me miraban raro yo no lo entendían entonces me senté. Luego me miré en mi mini espejo y ¡ tenía alas ! , me asuste mucho fui al baño, y me di cuenta de que podía volar. Luego cuando termino las clases fui al médico y me dijo que era una enfermedad llamada : alatosis. Me quede con una cara rara, entonces dijo que se quitaba en 24 horas, así que me encerré en mi habitación y al día siguiente me desperté y ya no las tenía , pero contagie a toda la clase.Este fin de semana unos niños jugaban en el campo al escondite. Uno de los niños llamado Juan fue a esconderse detrás de unos arbustos y se encontró un perrito atado y abandonado. LLamó a sus amigos Luis y María y entre los tres lo soltaron.
Se lo llevaron para dar,e comida y agua.De repente me doy cuenta cuenta que me estan saliendo alas:
Era Martes, me desperté, desayuné, me vestí y me fui, cuando llegue a clase todos me miraban raro yo no lo entendían entonces me senté. Luego me mire en mi mini espejo y ¡ tenia alas ! , me asuste mucho fui al baño, y me di cuenta de que podía volar. Luego cuando termino las clases fui al medico y me dijo que era una enfermedad llamada : alatosis. Me quede con una cara rara, entonces dijo que se quitaba en 24 horas, a si que me encerré en mi habitación y al día siguiente me desperté y ya no las tenía , pero contagié a toda la clase.Estaba paseando por la nieve cuando me encontré a un ZORRO chiquitito. Busque a la madre pero no la encontré entonces me lo lleve a casa- ¡Tienes un arañazo!!!-exclame. Lo curé y lo lave después le puse nombre y decidí llamarlo RAYO. A la mañana siguiente lo lleve al veterinario todo salió bien. Luego jugamos toda la tarde con la pelota.
Aquí podéis escuchar el primer programa de Radio Edu de nuestra clase 3º B
Primer programa de la clase de 3º B. En esta ocasión los alumnos eligieron hablar sobre una aplicación que usan a menudo y los mayores no sabemos bien de que va. Nos lo cuentan Aldara Cabanillas, Lidia del Puerto, Patricia Jiménez, Ana Castillo y por último Elena Prieto nos lee uno de sus relatos de entre los muchos que escriben los alumnos en el blog de la clase:
Erase una vez , mi abuelo Emilio , que encontró una caja de madera en la que dentro encontró una nota que le decía :
Quién encuentre esta carta se tendrá que ir a la playa , en la orilla encontraras una botella de cristal la botella es de color negro.
mi abuelo salió corriendo hacia la playa. Allí encontró la botella que tenía otra carta , en ella estaban escritas las coordenadas de otras dos cajas la carta decía da treinta pasos al sur y cava diez metros entre dos palmeras piensa que hay dos cajas una contiene treinta mil diamantes y la otra una araña negra . Mi abuelo sorprendido por los diamantes se dispuso acabar pero no entendió bien el mensaje y se puso acabar en el lado izquierdo, por suerte era la caja de los diamantes y así muy contento regreso a casa para celebrarlo con la familia.
¡FIN!
Manuel Corchado Sánchez 3º B
Un día soleado iba por el bosque y me encontré con una casa en el medio de la nada con una señora dentro de ella que me dijo:
- Niña siéntate soy amiga de tus padres- yo asentí y me senté. Después la señora me puso una bandeja de galletas
- Gracias- dije. Tenían chocolate.
-Están muy buenas- era verdad. Luego me fui de esa casa y al día siguiente volví así todos los días para probar esos pasteles y galletas.
Aldara Cabanillas Hidalgo 3º B
Una mañana me desperté con el sol en la cara. Cuando miré no estaba en mi cuarto ni tampoco en mi cama.
Empecé a llamar a mis padres pero nadie me contestaba. Me levanté y escalé hacia la luz. Cuando llegué arriba me lleve una sorpresa estaba dentro de mis zapatos y me había convertido en una niña muy pequeñita...
Entonces entró mi madre en la habitación y me puse a gritar pero no me oía. Después llego mi padre porque no me encontraban pero tampoco me oía.
Me puse a dar saltos para que me vieran pero tampoco, entonces me caí dentro del zapato. Cuando abrí los ojos vi a mi madre que me llamaba para ir al colegio, todo había sido una pesadilla.
FIN
Carlota Barragán Domínguez 3º B
Estaba en un bosque cuando me encontré un dragón azul y blanco.
Estábamos allí dispuestas a entrar. Se nos había quedado una Tablet. Cuando entramos vimos un espejo.
-Aldara ni sete ocurra- dijeron las chicas.
-Es la única forma- respondí.
-Vale pero solo por esta vez-dijeron.
-BLODY MERY, BLODY MERY, BLODY MERY-dijimos.. Después el espejo nos adsorbió y entramos en una habitación. Por fin vimos la Tablet.
Aldara Cabanillas Hidalgo 3º B
Estaba haciendo la maleta porque me iba a México a conocer a Prive un grupo en el que habitaban JEAN, DARIAN,LIBARDO, ORSON, RAFL Y NAIM. Cuando llegamos a casa Prive saludamos.
Érase una vez una pandilla de niños que fueron a dar un paseo con las bicis. Fueron a la torreta. De la torreta fueron al basurero. Del basurero fueron al polígono. Del polígono fueron a la plaza de toros. De la plaza de toros fueron al Zurrón. Del Zurrón se fueron a casa, pero se les fue haciendo de noche. Al final se les hizo de noche del todo y tuvieron que hacer una candela. Tuvieron que aplanar el suelo para poder dormirse, les daba mucho miedo veían mucha sombras y no sabían lo que lo que era. Escucharon un ruido parecía un lobo hicieron ocho candelas más y se durmieron. A la mañana siguiente paso por allí un coche de la Guardia Civil y les dijo:
-Vuestros padres os están buscando y les dijeron;
- Lo sabemos pero es que le dijimos ayer que íbamos a hacer un viaje muy largo con las bicis y lo estamos haciendo ahora luego nos vamos.- le dijeron. Luego se quedaron una hora esperándolos y al final llegaron, soltaron las bicis y corrieron a abrazar los llegaron a casa y se durmieron con una sonrisa muy grande de poder haber venido a casa y haber vivido una aventura.
Rafael Sánchez Centeno 3º D
Iba a caballo trotando cuando me adentre en un bosque
Érase una vez una niña que se llamaba María. Me la encontré en un bosque abandonado. iba con un delantal y sin zapatos. Me dio mucha pena, la cogí en brazos y le pregunte:
- ¿Tu cuantos años tienes? me dijo yo tengo seis años y mis papás me dejaron sola.
-Tenias hermanos?
- Cuando me dejaron aquí me dijeron que tenia una hermana.
Entonces yo me acordé que hablaban mis padres que tenía una hermana pero la tuvieron que dejar. Me la llevé a mi casa y se durmió en el camino. A los cuatro minutos se despertó y le dije:
-¿Tienes hambre? y me contesto:
- Si mucha hambre.
Cuando llegue a casa, le pregunte a mis padres si ella era mi hermana y respondieron:
- Si, si es tu hermanita..
Clara Manchón Castillo 3º B
Este año con lo de covid 19 no vamos a poder ir a hacer la carrera contra el cáncer. Así que compraros la camiseta de este año y ir por las calles de Azuaga y haceros fotos y luego subirla a todas la redes sociales el día siete de noviembre y cuanta más gente vea las fotos más gente comprara la camiseta y recaudaran más dinero para ayudar a los enfermos. Así que compraos la camisetas y aceros las fotos.
Lidia del Puerto Aldana 3º B
Érase una vez, iba yo volando en un caballo volador y me encontré un colegio, que me quede asombrada y entonces decidí entrar, pare el caballo y entré. Cuando abrí la puerta estaba todo maravilloso y se veía todo recién pintado los niños y niñas que había eran muy guapos y las clases eran espectaculares. Había también una biblioteca y yo me llevé un libro porque a mí y a mi familia les encanta leer y las profes que había allí me dijeron que podía coger todos los días que les visite unos libros. También había una sala de juegos que estaba llena de chismes y un recreo supergrande y maravilloso. Un pabellón espectacular y eso es lo que más me gustó porque a mí me encanta hacer ejercicio físico y también leer. Yo iba todos los días a ese colegio y como yo no tenía trabajo me dijeron que si quería ser profesora, entonces contesté que sí. Me gustó tanto todo que cuando llegué a casa se lo conté a toda mi familia y se me ocurrió llamarle al colegio, el Colegio Maravilloso y mis padres me dieron la enhorabuena y cuando yo estaba en la cama dije: ¡Yupi! ¡Tengo trabajo! Ese fue mi día en el colegio.
FINUn día estaba con mi primo jugando a fútbol. Teníamos música para animarnos mientras jugábamos. Pero sonaba algo muy extraño y mi primo dijo:
-¿Qué suena?-.
Yo le dije: - no sé-, pero mi primo exclamó: -¡es la pelota!-.
De pronto la pelota nos empezó a decir: - Hola, soy vuestra amiga, no me deis patadas por favor, sé que queréis jugar para divertiros, pero es que a mí no me gusta. Ya sé que sirvo para jugar con vuestros pies, darme patadas y meterme en la portería cuando metéis un gol-.
Nos quedamos boquiabiertos y prometimos no darle más patadas a esa pelota,así que empezamos a jugar con otra pelota de mi primo. Pero la otra pelota estaba triste porque hacía mucho tiempo que ya no jugábamos con ella, pero lo que se promete se cumple, y tuvimos una tarde de primos muy rara.
FIN.
ELENA PRIETO CAPILLA 3º B