Os voy a contar como mi amiga y yo nos convertimos en reinas por un día. Todo empezó cuando nosotras estábamos desayunando, cuando de repente mi madre gritó:
-¡chicas venid! Nosotras nos sorprendimos (al ver a mi madre gritar). Ella nos llevo al salón, nosotras dijimos:
-¿Por qué nos llevas a este sitio? Ella responde:
-Ya veréis chicas. AL rato mi madre dice:
-Prestad atención al televisor. En él salió un hombre basto diciendo que íbamos a transportarnos a un lugar sorprendente. Al final el hombre tenía razón nos transportamos a…………………
Continuará
Ana Castillo Gordillo 4º B
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Añade un comentario