Erase
una vez una niña llamada Nerea que su sueño era ser nadadora. Empezó
a nadar a los 7 años y era bastante mala, pero sus padres la
convencieron para que se apuntara natación. A ella le pareció buena
idea por eso se apuntó todo el verano.
(Un
año después)
Cuando
Nerea tenía 8 años, ya había mejorado bastante, aunque algunos
compañeros se reían de ella, pero pasaba de ellos. Unos meses
después ya tenía su primera competición. Sus familiares fueron a
verla competir y ella estaba bastante nerviosa. Sus padres la
animaron dos o tres minutos antes de la carrera. Empezó la carrera a
las siete de la tarde, y los jueces dijeron:
-
Preparados… listos… ¡¡YA!!-
Nerea
empezó a nadar cada vez más y más fuerte hasta que llegó a la
meta. Cuando llegó le dieron una buena noticia , ¡había quedado
la segunda!
Cuando
salió de la piscina le dio un abrazo a sus padres y los bañó
Y
cuando creció cada vez fue creciendo más en las competiciones.
FIN
Laura Camacho Blanco 5º C
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Añade un comentario