Había una vez una niña
llamada Noah, ella siempre estaba viviendo aventuras en todos los
lugares a los que iba.
Un día sus padres le dijeron
que por sacar tan buenas notas la iban a llevar a donde ella
quisiera.
Ella decidió irse a las islas
Maldivas, allí conoció a un niños llamado Miguel, a su hermana
pequeña Cristina y a su hermana mayor Julia.
Ellos se hicieron muy buenos
amigos desde el primer momento y dio la casualidad de que estaban en
el mismo hotel con las habitaciones al lado.
Una vez que estaban yendo a
cenar se encontraron a una niña de su edad llamada Olivia, se
sentaron juntos para cenar y se hicieron todos muy buenos amigos, se
fueron cada uno para su habitación y se dieron cuenta de que también
estaba en esas habitaciones.
Que raro, 3 niños de la misma
edad con hermanas pequeñas estaban justo al lado en un hotel enorme.
Una gran aventura estaba por
comenzar.
Los chicos se dieron sus
teléfonos y se fueron cada uno a su habitación.
De repente a Miguel le llegó
un mensaje que decía:
-Veo que mi plan ha salido
bien y os habéis conocido, ahora todos juntos tenéis que ir al
lugar donde os conocisteis y allí encontrareis la primera pista para
tener unas vacaciones de película, y si no la encontráis tendréis
las vacaciones más horribles de vuestras vidas.
Mikel avisó a los demás y
todos fueron corriendo a la puerta del hotel, allí fue donde se
conocieron Noah y Miguel, pues se vieron al entrar pero no se
hablaron, también vieron allí a Olivia.
Allí había una planta de
plástico que al entrar en el hotel no estaba , y ¿ qué hacía una
mini maceta en la puerta del mejor hotel de las Maldivas?
Rápidamente los chicos
decidieron mirar en ella y de repente la planta falsa se soltó y
cayó al suelo.
Al caer dejó al descubierto
una nota, en ella decía:
Hola,
veo que sois unos niños listos y que por lo tanto muy probablemente
conseguiréis vivir unas vacaciones de película.
Pero
para ello debéis de seguir pensando en como conseguir la segunda
pista.
Hasta
la próxima..
PD:
la próxima pista la encontraréis comiendo, fijaros muy bien,
cualquier despiste podría costaron el desayuno equivocado.
¿A qué se refería con “el
desayuno equivocado” ? ¿ Los envenenaría a todos en el
desayuno o nos daría una pista que podría ir para la mesa de otros
huéspedes?
Todas esas preguntas y más
rondaban por sus cabezas.
Pero muy decididos a correr el
riesgo de morir en el intento de vivir las mejores vacaciones de su
vida bajaron las escaleras y fueron al comedor.
Allí había una mesa al fondo
que nunca nadie cogía, pues tenía el aire acondicionado roto al
lado y ni calentaba ni enfriaba, a parte estaba demasiado alejada de
las mesas del bufete.
Así que los chicos
decidieron sentarse allí mientras que sus padres, (que se habían
hecho también muy amigos) se sentaron en otra mesa.
De repente un hombre con pinta
de amargado con ropa de camarero les dijo dejando una bandeja tapada
sobre la mesa.
- Cortesía del señor …
De repente se le cortó la voz
y volvió a las cocinas sin decir nada más.
Al quitar la tapa en vez de
comida había un nota.
En ella ponía:
Hola
de nuevo, veo que sois más inteligentes de lo que pensaba y por eso
quiero enviaros la ultima pista y la más difícil de encontrar para
que paséis las mejores vacaciones de vuestra vida.
Hasta
la vista..
PD:
La próxima pista está en una de las 100 habitaciones que hay en
vuestra planta.
¿Cómo
iban a encontrar una pista
en 100 habitaciones en menos de 24h?
Pero… había algo que no les
cuadraba.
En esa planta solo había 99.
Lo sabían porque buscando la
primera pista las habían contado. Pero al lado de todas las
habitaciones había una pequeña lámpara y curiosamente había una
lámpara sola al lado de un gran espacio en el que no había nada.
Algo les daba mala espina.
Dieron un ligero golpe en la
pared y…
Sonaba algo muy raro, no
sonaba a una pared normal y corriente, sino a una pared falsa, sonaba
a un espacio hueco.
Miguel cogió aire y con todas
sus fuerzas le dio un golpe a la pared y…….
BUUUM!!
La pared se derrumbó, era una
habitación perfectamente sellada, era casi el secreto mejor guardado
de la historia, pero nada se le resistía a estos cinco amigos.
Miguel entró el primero,
después Olivia y Julia, seguidas de Noah y Cristina.
Miguel:
Esto es muy raro, es como una
de las habitaciones del hotel pero muy antigua y llena de telarañas.
Julia:A ver ……
Olivia:
Cuidado, oigo pasos, cada vez más fuertes, se aproximan
a nosotros…
Cristina: Esconderos, está a
punto de entrar.
Miguel: Yo me esconderé
detrás del sofá.
Olivia: Julia y yo nos
esconderemos bajo la cama.
Noah: Cristina y yo nos
saldremos a la terraza a escondernos detrás de los barrotes.
Sujeto Anónimo: Hola… ¿Hay
alguien hay…?
Los cuerpos de los niños
temblaban, cada vez su voz fría y desgarradora se oía más cerca.
Ellos muertos del miedo
decidieron salir, como valientes amigos que se apoyaban entre ellos.
Miguel: ¿Quién anda ahí?
Sujeto Anónimo:
Jajajajajajaaaaaa…
Olivia: ¡Vete!
S.A: Estáis a punto de
conseguir vuestras mejor vacaciones, solo os hace falta el reto
final…
Noah: ¿Eres tú quién ha
estado haciéndonos esto todo este tiempo?
S.A: Puede que sí o puede que
no…….
El sujeto entró en la
habitación, era un hombre que les resultaba familiar…
Aunque no se conocían, los
cinco sin saberlo vivían en el mismo pueblo, lo descubrieron en la
primera cena, cuando conocieron a Olivia y se estuvieron preguntando
sobre sus vidas.
Cristina:
El Señor Sebastián,
era el hombre más extraño de todo el pueblo, vivía en una casa
hecha pedazos, y siempre iba de negro.
Sebastián: Efectivamente, y
la última prueba era no huir de mi y quedaros para descubrir quién
era, y como la habéis completado os voy a conceder vuestras mejores
vacaciones, tengo preparada una casa rural en la isla más grande de
todas, la cual está vacía y la podréis disfrutar solo vosotros,
haced las maletas que nos vamos…
Cristina: ¿Y nuestros padres?
Sebastián: Ya he hablado con
ellos y están de acuerdo , así que. ¿Estáis preparados para la
aventura?
Todos: Siiiiii
LA AVENTURA CONTINÚA EN LA
MEJOR ISLA DE LAS MALDIVAS
Olivia Martín de la Vega Morillo
6ºC
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